La ruptura de Oggún y Shangó
LA RUPTURA DE OGGUN Y SHANGÓ
Ogún y Shangó
eran grandes amigos. Siempre andaban juntos en los güemileres y
compartían hasta la comida. Pero el dueño de los hierros sentía envidia
del rumbero Shangó, que tenía suerte para las mujeres y que todos
admiraban por sus facultades de tamborero, bailador y hombre simpático.
Una noche, Ogún, lleno de soberbia, amarró con sus cadenas a Shangó mientras este dormía. Shangó despertó sobresaltado y al verse amarrado comenzó a echar candela por la boca hasta derretir las cadenas con que lo habían querido apresar.
Desde entonces, comenzó la enemistad entre Oggún y Shangó.
Una noche, Ogún, lleno de soberbia, amarró con sus cadenas a Shangó mientras este dormía. Shangó despertó sobresaltado y al verse amarrado comenzó a echar candela por la boca hasta derretir las cadenas con que lo habían querido apresar.
Desde entonces, comenzó la enemistad entre Oggún y Shangó.